Actualmente Estados Unidos y especialmente Europa están atravesando una crisis debido al aumento récord de los precios de la energía. Esto es particularmente preocupante ya que se da en medio del invierno, época en donde las empresas y los hogares suelen hacer más uso de la electricidad para hacer frente a las bajas temperaturas.

A pesar de que varios países están luchando para controlar estas alzas, más que nada porque aún se encuentran en vías de recuperación económica post COVID-19, es una situación difícil de manejar que afecta, no solo a los hogares y empresas locales sino también en otros aspectos como el incremento de ciertas materias primas alrededor del mundo, como en el precio de los aceites y sus derivados.

Para tener una idea, los precios del gas natural han pasado de 16 euros por hora a 75 euros por hora en los que va desde el inicio de la crisis energética. Un aumento considerable y sin precedentes que pone en aprietos a la población europea ya que representa una subida de más de 360%.

A pesar de que la Unión Europea, desde hace algunos años, está reduciendo paulatinamente la dependencia de los combustibles fósiles y pasando a energías renovables, el cambio no ha sido suficientemente rápido como para hacer frente a la crisis que mantienen actualmente. 

El gas natural y el carbón representan más del 35% de la producción total de la Unión Europea y el gas representa más de una quinta parte. El uso de uno u otro varía de país a país y, a medida que el carbón se ha ido eliminando progresivamente, muchos países han adoptado el gas natural como recurso de transición mientras instalan alternativas ecológicas como las turbinas eólicas y los paneles solares. Sin embargo, el gas es más utilizado para la calefacción y cocina en los hogares, lo que hace que sean los más afectados al momento de recibir las facturas de consumo.

En Chem Fluid hacemos un breve análisis de esta situación.

¿Por Qué se Da Este Aumento Acelerado en los Precios de la Energía?

Esta alza crítica de los precios se da por varias razones:

• Actualmente existe un aumento de la demanda de energía debido a la eliminación de las restricciones que ocasionó la pandemia.
• A esto se le puede sumar una reducción en la oferta del gas a nivel mundial.
• Si bien la eliminación del carbón como fuente principal de energía es algo positivo hacia la transición de energías renovables, la producción de energía eólica ha sido menor debido a factores metereológicos.
• La reapertura de negocios, oficinas, restaurantes, entre otros después de la pandemia ocasionó una afluencia de consumidores en los locales físicos y esto provocó un incremento en la demanda de energía.
• Además, la reciente guerra entre Rusia y Ucrania también ha impactado, ya que Rusia es el principal exportador de gas de la Unión Europea.
• Al igual que Europa, Asia también ha sufrido un invierno muy frío, lo que ha ocasionado una alta demanda desde países con una población densa como lo es China.

Crisis General de Materias Primas

Como era de esperarse, este aumento en el precio del gas afecta el costo de otras materias primas alrededor del mundo. 

Entre la disminución del inventario, la reapertura de la economía mundial, el aumento de la demanda y la lentitud de la oferta, se ha creado una escasez de productos que afecta la producción.

Se pronostica que materias primas como el crudo, el oro, el aceite y el maíz subirán sustancialmente de precio durante los próximos 12 meses. De hecho, desde hace algunos meses la escasez de microchips ha afectado gravemente la industria tecnológica y automotriz a nivel mundial.

Este fenómeno se debe a que cuando un inventario se limita o reduce como lo que está sucediendo con el gas, afecta a otro tipo de inventarios que a su vez también están en crisis por la falta de personal en varias cadenas de distribución. Según expertos, la única forma de equilibrar los mercados es la destrucción de la demanda a través de precios más altos.

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